El garrote (en latín: laqueus) como instrumento de ejecución data de tiempos de la República Romana. Se sabe que una vez sofocada la segunda rebelión de Catilina, Publio Cornelio Léntulo Sura fue estrangulado junto a otros conspiradores por medio del laqueus; algunos bajorrelieves de la época testimonian su uso.1​
En el caso de este método de ejecución, el adjetivo «vil» deriva del sistema de leyes estamentales en el medievo. Por una cuestión simbólica, la decapitación con espada se consideraba pena reservada a los integrantes de la nobleza; en cambio, para los villanos (habitantes de las …